Fuiste tú, a quien, en un día de enero,
le entregué mi emotividad;
te imagino entre mis recuerdos
y en ellos me mata tu frialdad.
Eres la dulce sensación
que a mis sentidos enternece;
eres tú, el hombre
que en mis sueños me enloquece.
Ansiedades van conmigo;
ya no pretendo estar contigo.
Sólo espero que la sensibilidad
que te brindé abiertamente,
te recorra en esas noches
en las que tu melancolía,
se convierte en agonía.
Donde en las largas madrugadas
te evoquen ilusiones añoradas;
aquellas que viviste junto a mi,
que me quitas y que me hacen sufrir.
Triste va mi alma deambulando por la vida.
Fuiste otra oportunidad que me fue esquiva;
de tanta dicha y alegría sutilmente compartida,
sólo queda el silencio de experiencias vividas.
Ya no quiero más mentiras;
ya no quiero fantasías.
Hoy tan solo quiero,
vivir la vida que constantemente me toca,
mientras mi alma con nostalgia te invoca.
Regreso a mis adentros
y me quedo con el susurro,
de las noches sin estrellas
y con el reflejo de la luna
que me embriaga y me desvela.
Ahora que ya no estás:
descanso y vuelvo a empezar.
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Comentarios
solo de ti pueden nacer esas bellas palabras cargadas de melancolia.
Hermoso escrito.
Un beso
que enloquecen mis anhelos
de ser ese Hombre
de todos tus desvelos,
pero no lo merezco.
Cómo re-descubrirte
cómo pegar la hoja
cortada por el machete
del primer explorador
cómo deshacer sus huellas
convertidas en palabras,
en la playa de tus nostalgias,
no lo merezco.
No puedo doblar el tiempo
con Daliniana virtud
no puedo ser tela
para trazos ya pintados
Tantas ansiedades resecas...
Eres fuente inagotable de sentir?
que es diferente en mi?
soy otra esquiva oportunidad?
Como un vulgar ladrón
hurgo en el tiempo
para robar de tu corazón
las ilusiones vividas...
No son mías y nunca lo serán
como tampoco soy
lo que tu nostalgia
hoy invoca,
sólo soy el final
de un nuevo comenzar.